Había que despedir el año y pese a la más que apetecible invitación de niblap para acompañarlos a hacer algo por las Ubiñas, la necesidad de estar a una hora prudente en Oviedo, hizo que al final me decantara por algo sin duda más mundano, pero tambien corto y cercano, como por ejemplo volver al Vízcares, picacho al que no visitaba desde hacía muchos años. Y es que a lo más alto de la Sierra de Aves ya había subido por la ruta habitual por Traslafuente y por la más corta, y sin duda mucho más dura, Vallina Luiña, junto a la Xerra Degoes. Esta vez lo haría por Llanoriu, ruta que ya tenía en mente desde hacía mucho tiempo y qué mejor ocasión que esta.
DATOS DE LA RUTA
- Fecha: 30/12/2013
- Zona: Sierra de Aves
- Concejo: Piloña (Asturias)
- Inicio/Fin: La Fragua - Riofabar
- Distancia: 19 Km
- Desnivel máximo: 1.125 m
- Desnivel positivo acumulado: 1.165 m
- Tiempos: 7 horas
- Dificultad: Moderada. El tramo que queda por encima de la majada Llanoriu hasta ganar la cuerda del Vízcares, según la época, podría presentar mucha maleza.
La Fragua (250 m) es una casería que se localiza unos metros antes de llegar a Riofabar, en el valle de Espinareu. Poco después de pasarla dejé el coche, junto al puente La Cruz, cuando apenas si había amanecido y el cielo aún se teñía de naranjas.
Al otro lado del río está el barrio de Riquemáu, antesala del pueblo de Riofabar.
Retrocedí unos metros por la carretera hasta la casería de La Fragua, que en sus tiempos ya podemos imaginamos lo que debió de ser, y casi enfrente, perpendicular a la carretera, vemos que entra un buen camino por el que tenemos que tomar.
La caleya sube por el valle del arroyo Llanoriu, pero a los pocos metros tendremos que abandonar el camino que continúa por el fondo del mismo, para tomar otro, que a la derecha comienza a ganar altura rápidamente con varias revueltas.
De esta manera pronto empezaremos a disfrutar de las vistas sobre el valle de Espinaredo, con Riquemáu ya muy abajo.
La senda nos lleva a un colladín que debemos atravesar para retomar el valle de Llanoriu por el que haremos buena parte de la ascensión.
El camino es ancho en todo momento y sube siempre por la margen izquierda del valle, aunque, eso si, sin dar un solo respiro.
A nuestras espaldas, las vistas se van abriendo y ya aparece la Sierra de Peña Mayor en toda su longitud.
Por fin, tras un par de zigzags finales, la senda gira a la derecha y gana el collado de La Degollada (798 m) que nos da vista a la majada de Llanoriu, con varias cabañas. Estamos ya a los pies del extremo noroeste de la Siera de Aves. Para izarnos a ella lo mejor es dirigirnos hacia el collado Llanoriu (flecha).
El ascenso hasta el collado, por la loma de Los Caspios, no tiene mayor dificultad que el desnivel a salvar, aunque en primavera o verano, aquello parece convertirse en un felechal, lo que puede hacer que sea más incómodo que en estas fechas.
En el collado Llanoriu (957 m), restos de una antigua cabaña y buenas vistas sobre el collado de La Degollada y al fondo la zona de las Sierras del Frieru y Sellón, con el Faceu, por donde pasa la Calzada del Sellón.
Desde el collado ganamos unos metros para alcanzar la cumbre del Pico Collau (1.071 m), desde el que ya "solo" quedará ir recorriendo hacia el sureste toda la sierra. En mi caso, el viento tiraba fuerte y extremadamente frío arriba, por lo que la mayor parte del recorrido lo hice unos metros por debajo de la cumbrera de la sierra, para ir un poco más protegido. Abajo queda Llanoriu.
Cortando a media ladera hacia la collada de Cuetu Mermeju, marcada con una característica aguja.
Traspuesto Cuetu Mermeju (1.069 m) vemos ya, la mayor parte de la Sierra de Aves que iremos recorriendo, en esta ocasión, con una leve nevada caida este misma noche.
Dirigiéndome hacia el pico de Llanu Arbosu (1.268 m), en el que no llegaré a hacer cumbre y bajo el que pasaré para luego cumbrear por Cantu Praón (1.307 m).
Abajo quedan las praderías del mayau Felgazu, con restos de viejas cabañas, colgada sobre el valle del Infierno. El acceso a este mayau desde Miera, a la altura de Puente Ortigal, en la carretera de Riofabar a La Pesanca, también tiene que ser digno de recorrerse .
Cuando me animo a cumbrear un tramo - y de paso a soportar el fuerte viento - disfruto de las vistas al norte, hacia el valle del río Color, con la marcada Foz de Foceyu, que crucé hace un par de años. Al fondo, en el extremo izquierdo de la foto, la Sierra del Sueve.
Una vista atrás desde la zona de Fayascal (1.345 m), por donde acabo de pasar ....
.... y lo que me queda a cumbre.
Y por fin cumbre (1.421 m), con el pequeño buzón y el vértice geodésico.
Buenas vistas en cumbre, un poco entorpecidas hacia la cordillera por algo de bruma y la posición del sol. Aqui, de izquierda a derecha, la Llambria, asomando tímidamente el Tiatordos, la pica del Maciédome, la inconfundible y afilada silueta del Campigüeños, La Carasca, Los Tornos y delante el Maoñu. Menudo elenco de cumbres. Solo me falta por conocer el Maoñu. Ese para otro día, aunque ya hace una temporada que tengo la ruta de ascenso en mente.
La Mota Cetín, con el Cuera al fondo, y a la derecha, los Picos tapados por las nubes.
Picos de Europa, cubiertos, con el Pierzu delante y más cerca aún la Sierra de Tribierto, encima de Sellaño.
El valle del río Color, con las foces de Foceyo y Les Cuerries. Sierras de Pesquerín, izquierda, y del Sueve, al fondo.
Hacia la cordillera no se veía con mucha claridad. Así y todo se distinguian perfectamente cumbres como el Torres o la Peña el Vientu y por supuesto las Ubiñas, con Peña Ubiña, Castillines, Fontanes, ....
En cumbre coincidí con un par de montañeros de Infiestu, que estaban haciendo mi misma ruta, pero a la inversa. Para haber llegado hasta aqui desde La Fragua pasando por Traslafuente, se ve que habían madrugado incluso más que yo. Un poco de charleta, un par de fotos y se fueron rápidamente para abajo, por donde yo había subido. Una panorámica desde cumbre hacia el sur (pinchad en ella para verla más grande).
Había que celebrar el fin de año, así que me monto mi particular belén de cumbres. Mantecados, mazapanes, ... y a falta de sidra champanada, un chupito de orujo para calentar el cuerpo, que hacía un frío de narices.
Le echo un vistazo a la canal de Xerra Degoes, la "directísima al Vízcares". Abajo del todo se ve la pista que sube a la Foz de Moñacos, justo en el punto en donde saldré a ella bajando desde Traslafuente. Anda que no quedaba tajo ni nada.
Así que me despido de la cumbre. A ver lo que tardo en volver a verte, mojón.
Y para abajo, a seguir cresteando la Sierra de Aves, que al final acabaré por recorrerla casi que entera. Ya se ve la verde planicie de la collada Traslafuente, a donde tengo que bajar, a la derecha de la cresta. Paso por El Cabezu (1.367m) y bajo a la collada de Collau Miradoriu (1.279 m), que antecede al Picu La Verdad (1.298 m).
Bajo el Picu la Verdad, se abre el Collau la Verdad (1.241 m) y a continuación la cumbre del Picu L´Asprón, a donde no tengo que llegar. Desde el Collau la Verdad, empezaré a perder altura directo hacia la collada Traslafuente, cortando a media ladera.
Por fin Picos se había quitado la boina y se dejaban ver perfectamente, con la Peña Santa presidiendo. Preciosa estampa.
Traslafuente cada vez más cerca, aunque antes pasaré por la Biesca los Texos, bajo el Xerru la Teya, un precioso bosquete con espectaculares ejemplares de tejos y espineras y varias camperas de pasto en medio.
Y por fin alcanzo la zona alta de Traslafuente, con buenas vistas hacia el valle Llevarda, que cae hacia Vallemoru. Impresionante el hayedo que tapiza el fondo de este valle y que atravesamos cuando hicimos la travesía de Taranes-Vallemoru-La Pesanca.
Bajo hacia el fondo de la collada (1.053 m). Nunca lo había pensado, pero la majada Traslafuente no parece estar en el mejor sitio. Orientada al noroeste y bajo la mole del Maoñu resulta muy sombría, por lo que conserva aún una buena capa de nieve. Aunque supongo que en verano, cuando realmente se utilizaba, no importaría tanto.
Cruzo Traslafuente, mirando el valle de la Estaquera por donde tengo que bajar, pero de momento me acerco hasta la fuente.
Y ya de paso, doy una vuelta por la majada, con varias cabañas cuidadas y en muy buen estado. Desde qui se tiene una preciosa vista de la Sierra de Aves, que acabo de recorrer.
Traslafuente bajo las escarpaduras de El Tren, en el crestón noroeste del Maoñu. Esa zona habrá que decidirse de una vez e ir a conocerla.
Por fin dejo Traslafuente. Vuelvo a la collada y bajo ella tomo la marcada senda que baja con tendencia a la derecha, buscando la cercada y más solariega majada de Cureñu.
En Cureñu (870 m) me lo vuelvo a tomar con calma. Doy una vuelta por entre sus cabañas y me acerco a su fuente, que en verano suele tener más agua que la de Traslafuente. Al fondo la cumbre del Picu Faceu y a su derecha el torreón que forma el Picu Castiellu.
Salgo de Cureñu por la senda que sin pérdida me llevará valle abajo, con buenos ejemplares de robles en la zona alta (NOTA: Desde 2016 hay una pista que desciende desde Cureñu, sustituyendo al viejo sendero).
Zona baja del valle de La Estaquera, con el hayedo de Monte Degoes a la derecha y el Monte la Cerezal a la izquierda.
Poco a poco vamos internándonos en el hayedo que cubre practicamente toda la zona alta del valle del Infierno.
Llegamos así al puente que permite cruzar la riega la Estaquera (575 m). Al otro lado comienza ya una buena pista por la que continuaremos hasta salir de este valle y desembocar en el del Infierno, que sube hacia la foz de Moñacos.
Con todo, una preciosidad este tramo de pista, en medio del hayedo.
La pista acaba por dar un giro a izquierdas en las fincas de La Cerezal y salirse del valle de la Estaquera, para tras unos metros perder altura y acercarse al río del Infierno, con preciosas pozas.
Esta pista acaba saliendo a la de la Foz de Moñacos justo a la entrada de la Foz del Infierno (520 m), y aunque la pista vadea el río, nosotros lo cruzaremos por el Puente Cueva.
Toca ahora seguir bajando por la pista de Moñacos en dirección al área recreativa de La Pesanca.
Y es justo en este tramo donde se ve perfectamente la cumbre del Vízcares de donde vengo, sobre la canal de Vallina Luiña, con el crestón de Xerra Degoes a su derecha y las cabañas de Degoes en su base.
Continuo bajando tranquilamente, disfrutando del paseo y sacando fotos al río. Voy bien de tiempo y esta zona de los Montes del Infienro me encanta. No me canso de venir por aqui. Siempre resulta igual de fotogénica, da igual la época del año.
Paso por las casas del Muñizón y poco después alcanzo, por fin, el área recreativa de La Pesanca, una de las mayores y seguramente la más guapa (esto es una opinión, claro) de Asturias. En el aparcamiento había una decena de coches, pero nadie en el área, probablemente montañeros por la zona de Moñacos. Yo paro a comer, que ya iba siendo hora, en alguna de las mesas de la zona baja, donde no me molestará nadie....
... como mucho este raitán, que no me quitaba la vista de encima, saltando de rama en rama a mi alrededor, esperando sin duda, a que me fuera para acercarse a comer las sobras. Un buen trozo de pan se quedó allí.
Desde La Pesanca restan unos 2 km hasta el pueblo de Riofabar. Un pesado trámite que hay que salvar como mejor podamos. El sol ya hacía rato que se había ocultado tras los montes y la verdad es que hacía frío.
De todas formas, y para ahorrarme un buen trozo de carretera, antes de llegar a Riofabar, tomo por un camino que baja a la derecha, cruza el río y se dirige a las casas de La Puente.
Paso de esta forma de largo Riofabar por la margen derecha del río. No solo resulta un poco más corto, sino que el camino resulta ser bien guapo.
Lo que comienza como una pista hasta las casas, se convierte luego en una buena caleya, para terminar siendo poco menos que un precioso sendero junto al río, que sale a la carretera justo en el puente de La Cruz, es decir, justo enfrente de donde tenía aparcado el coche.
Y eso es todo. La próxima ya será en 2014. Os dejo el track.
Un saludo
Cienfuegos
Lo de la petaca de orujo, muuuuuy bueno. A ver la próxima que coincidamos la llevas, y hacemos como en el facebook, le damos a lo de compartir.
ResponderEliminarSantos, pues fue que no me acordé de ella, porque ya hace una buena temporada que la suelo llevar encima. De hecho solo sale de la mochila para el chupito de rigor o para recargarla. Hombre, en principio está pensado para cuando llevo café soltarle unes pingarates.
EliminarUn saludo
Preciosa ruta compañeru. No tengo la suerte de haber hecho esa cumbre. Creo que este año, lo podré conseguir por fin. Me ha gustado mucho el reportaje. Gracias.
ResponderEliminarViti, te gustará. Es de las que merece la pena tomarse la cumbre con calma, pues tiene unas vistas impresionantes.
EliminarUn saludo
Me gustó mucho la ruta, no se ve mucha nieve pero frío si que debía hacer, menos mal que llevaste el orujo de compañero.
ResponderEliminarUn saludo.
No, nieve poca, la verdad. Hombre no es un pico muy alto, unos 1.400 m, pero este invienro empezó muy bien, pero ahora mismo está siendo muy triste en cuanto a nieve. Dicen que "l´inviernu nun lu come el llobu". A ver si es verdad.
EliminarUn saludo
Que bien me viene tu ruta de hoy amigo para ir haciendo boca ya que es la ruta que tengo para el día 25 de enero.
ResponderEliminarLo de la petaca y los mazapanes un puntazo si señor jajaja.....
Un saludo
Pablo, pues ya verás que la ruta es muy guapa y entretenida. Seguro que os gusta.
EliminarEl orujo resultó buen sustituto de la sidra champanada, si, ja, ja.
Un saludo
Es un circuito interesante. Espero poder hacerlo algún día. Yo solo subí un vez por la directa. Un saludo.
ResponderEliminarJuan, son rutas totalmente diferentes. La directa es muy dura y ofrece pocas vistas, aunque resulta espectcular. sobre todo la salida directa a cumbre (al menos así la recuerdo yo, cuando fuimos). Esta es para tomárselo con más calma.
EliminarUn saludo
Muy bien planteada la ruta y magníficas fotos, Cienfuegos. Sólo he estado una vez en el Vízcares y hace ya mucho tiempo pero quizás este año me acerque de nuevo hasta su cima. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarGracias Victor, pues si vuelves a arrimar al Vízcares, ten en cuenta esta ruta. Es una opción muy guapa.
EliminarUn saludo
Me has recordado lo mal que lo pase en esa ruta hace un año un dia de calor de 32º tambien desde la Fragua, y arriba en la cima ya nos quedamos sin agua, que no encontramos hasta la majada de Cureñes, puff que mal lo pase. pero ahora viendo estas imagenes tuyas da gusto recordarlo.
ResponderEliminarEstupendo reportaje como siempre Javi, y ademas te copio...lo de la petaca, juer que tengo una en casa sin darle uso, y la voy a meter en la mochila. por lo de les pingarates jajajaj.
Un Saludo.
Buenas, recuerdo haber visto el reportaje en vuestro blog. Si, un día de calor, no es la mejor ruta. Se va mucho tiempo sin sombra. Pues la petaca tambien la tenía por casa desde hacía años y la metí hará una temporada en la mochila, un día que llevé café y ahí se quedó.....haya café o no, ja, ja.
EliminarUn saludo
Otra delicia de reportaje, que fotazasssss, la del pájarito preciosa, entrañable y las demás d elujazo montañero jijijiji, y esta vez subieron las delicias navideñas directas al pico.
ResponderEliminarNuestro abrazotedecisivo Javi
Gracias Sara. El raitán debeía tener hambre el pobre, porue no sulene ser tan confiados, pero este no se apartaba de la mesa.
EliminarUn saludo
La sierra de Aves es imponente toda ella, la ataques desde donde la ataques. Pero desde luego Trasla fuente y Curueño no tienen parangón, sobre todo Curueño al atardecer xq puedes encontrarte allí tranquilamente a los corzos... Otro pico espléndido es el contiguo Maoño . Siempre disfruto mucho viendo tus espléndidas fotografías y los comentarios tan acertados. Saludos y feliz y montañero 2014
ResponderEliminarPaloma, pues el Maoñu es el que me queda por la zona. Lo tengo en mente hace mucho, pero tengo el antojo de hacerlo por La Rasa y el Tren y para eso hay que escoger el día, que no es sitio para mterse con mal tiempo.
EliminarUn saludo