Sierra de Caranga
Concejo de Proaza (Asturias)
La senda es más sorprendente si tenemos en cuenta que antes de que la carretera se abriese paso por las estrecheces de la increíble entalladura de Peñas Juntas, el Camino Real, es decir, la comunicación con la parte alta del valle, se hacía por la mucho más amigable ladera este de la Sierra de Caranga, a través la collada de Aciera, ruta de acceso habitual a la cumbre de La Forcada, que yo mismo comenté
De manera que como digo, el martes me acerqué a investigar un poco por la zona e intentar dar con la senda que observada por medio de las ortofotos (SIGPAC), tan clara y marcada se veía. Después de buscar por internet y preguntar aquí y allá, me habían confirmado la existencia de una senda que se llamaba la Senda de la Bobia. La distancia a recorrer no parecía mucha, así que pensando en una ruta sencilla, iluso de mí, dejé el coche en Proaza para volver luego, tranquilamente, por la Senda del Oso desde donde quiera que me llevara la citada Senda de la Bobia. Los 2 km hasta el pueblo de Villamejín, me los ahorro una pareja que me subieron en su furgoneta. Ya en Villamejín pregunté a una vecina que me confirmó la existencia de la Senda de la Bobia y que me dijo que arrancaba del Llano la Bobia, la marcada collada que se ve en la foto y que se destaca por un solitario árbol.
Salí de Villamejín por la parte derecha del pueblo con la vista puesta en la collada del Llano la Bobia. La idea es subir hasta una cabaña en la que se apreciaban unos depósitos de agua (círculo) y luego subir por encima de ella hasta el collado. En la foto el recorrido que finalmente tuve que hacer.
Desde Villamejín una buena pista arranca casi en llano y llega hasta la fuente de La Sinriella. Poco más allá cruza el río que baja de la collada de Aciera y empieza a ganar altura por entre las diferentes fincas.
Alcanzadas las primeras fincas, la caleya pierde entidad, pero sigue siempre en ascenso y con tendencia a la derecha, muy marcada, por entre diferentes prados en los que hay que ir pasando varias portillas.
Llegué así a la cabaña con los depósitos de agua. Por su izquierda continua un tenue sendero que sale del prado y toma hacia la derecha monte arriba.
Aquí empecé a liarla. El sendero está totalmente perdido y apenas se distingue entre la maleza. Empezaron a aparecer las primeras garrapatas. ¡¡Cagontó!!. De todas formas se sube bastante bien. En mi caso hacia la derecha a ganar la zona de piedra del extremo.
Salí a la cresta que cae desde La Forcada, dando vista ya al Desfiladero de Peñas Juntas. Preciosa balconada hacia un lado ....
... y hacia otro. Por cierto el día había empezado a torcerse. Sin embargo aquí ya la acabé de liar. No veía ningún sendero y al mirar el GPS vi que estaba muy alto. Demasiado. Muy por encima de la traza del sendero que quería haber tomado y que yo creía era el de la Bobia. De manera que decidí perder altura.
Desde donde estaba resulta imposible bajar hacia el lado de Peñas Juntas, de manera que empecé a recorrer la cresta hacia el norte. Aunque en la foto no se aprecia por momentos se estrecha mucho y presenta tramos con cierto patio, sobre todo hacia la izquierda.
Como no podía ser de otra manera la cresta acaba en un cortado. ¡Vale!. Destrepé mejor o peor por la vertiente de Villamejín y por entre un bosque de avellanos salí a un marcado sendero (438 m). ¡¡Bien!!. Parece ser el que estaba buscando.
El sendero se dirige hacia el crestón y lo atraviesa por una estrecha horcada, tal y como me habían comentado que sería.
Para dar vista al desfiladero, con la carretera en el fondo del mismo, bajo la mole de Peña Armada o Pico del Castro.
Desde aquí sigue ganando algo de altura y sorteando los cortados que caen desde lo alto de la cresta, internándose en el desfiladero. Mucha maleza en este tramo y las garrapatas ya podían contarse por cientos (y no, no es exageración).
El sendero alcanza un collado a la izquierda de un morro que se eleva sobre el río Trubia
Y da vista a una ladera de fuerte pendiente que se ha de recorrer perdiendo algo de altura. La vegetación era cada vez más espesa. Por tramos el sendero se pierde, aunque en general se percibe su traza. En algún sitio aún se observan armaduras.
Un vistazo atrás.
Superado un nuevo crestón se ve el siguiente tramo. Una primera parte con más roca, fácil de recorrer y una segunda parte totalmente tomada por felechos, cotoyes y maleza de todo tipo.
Llegué hasta un canchal, un llerón de piedra, en el que se pierde toda traza del sendero. Por más que lo busqué me resultó imposible dar con él entre la maleza. Hice dos intentos de seguir un poco más, ya que en el siguiente crestón se volvía a ver la traza, pero en el primero me fue imposible avanzar ni 10 m. En el segundo casi me voy abajo al no ver donde pisaba. La vegetación me pasaba por encima de la cabeza. El día se había ido torciendo mucho y amenazaba incluso tormenta. La garrapatas eran legión y amenazaban con comiendo vivo. Total, que me di por vencido.
Regresé por donde fui hasta donde había salido al sendero. Desde ahí continué por él para ver por donde iba. Hay un tramo muy tomado, pero por el que mal o peor, en ningún caso bien, se pasa. Se sale a unos prados a la derecha (vista desde el pueblo) del de la cuadra con los depósitos. Desde ellos se localizan senderos que bajan al pueblo.
Ya en la fuente paré a refrescarme y charlé un buen rato con otro vecino que según me dijo me había estado observando junto con otros paisanos desde el pueblo. El fue quien me aclaro muchas de las dudas.
En la ladera oeste de la Sierra de Caranga, no existe un sendero sino dos. El más alto es la Senda de la Bobia y arranca de la collada a la que yo salí. Se usaba para dar servicio a los pastizales que había en la zona alta (por tramos se observan trazas en la ortofoto del SIGPAC). El sendero inferior y que fue el que yo recorrí es la Senda de la Cruz y era la comunicación entre Villamejín y Caranga y por supuesto todo el valle de Teverga. Fue transitado hasta no hace mucho. Más adelante de donde me dí la vuelta, parece pasar bajo una gran cueva, (Cuamexida o algo así, siento no recordar perfectamente el nombre), sale a una zona de castaños ya cerca del final del Desfiladero y pierde altura después hasta acabar saliendo a Caranga de Abajo.
Total, que sin duda una zona para volver a investigar, pero en época de menos vegetación y sobre todo menos garrapatas. Os dejo el track por si le sirve a alguien y por supuesto agradeceré cualquier información sobre estos senderos.
Cienfuegos
NOTA: En enero de 2013, aprovechando la época de menor vegetación, volví a intentar recorrer la Senda de la Cruz. Lo conseguí de forma mucho más sencilla. Hice dos rutas en diferentes días, una recorriendo exclusivamente la senda entre Caranga y Villamejín. Otra ascendiendo a la Forcada desde la citada senda. También localicé diversos itinerarios para enlazar con la senda desde la vertiente de Villamejín, entre ellos el más cómodo desde la carretera de acceso al pueblo. Sobre todo ello tenéis otra entrada AQUI.
Gracies Javi por ir descubriendonos nuevos caminos, y a demas a esti nivel¡¡¡
ResponderEliminarQue hermosos parajes nos presentas y nos descubres, ideal del todo, conozco la senda del oso, pero en estos lugares ni había reparado y hoy me lo guardo en la lista de pendientes. Precioso reportaje. Te dejo mi abrazotedecisivo y que disfrutes de estos meses de veranito...a ver si empieza...aunque por aquí y por allí lo tengamos muy caliente por otros motivos bien conocidos, en fin...lo dicho.
ResponderEliminarMuy bonito reportaje; no encontraste el paso, estará totalmente cerrado, pero como ruta la veo peligrosilla,..., tienes que llegar al bosque de Casamante, se llama así, intentalo alrevés desde Caranga. Saludos!
ResponderEliminarDe nada Juan Carlos.
ResponderEliminarSara, malos tiempos para nuestras tierras. A ver si se arregla algo.
Marga, cuando vas por la Senda del Oso hacia Caranga, después del último túnel que te saca de Peñas Juntas, hay una zona en la que siempre cae agua a la senda. Junto a ella sube por medio de un cerrado bosque un marcado sendero con mucha pendiente. Es otro de los que tengo en pendientes por la zona. Lo tengo seguido un rato alguna vez y no se a donde llega. ¿Comunicará con la Senda de la Cruz?.
Un saludo y perdona por ser tan pesao :oD, pero es una zona que me gusta mucho y que por cercanía visito a menudo.
Creo recordar que es en la zona de los castaños centenarios, dónde sales de la senda y vas subiendo y llegas al punto que corta la peña, pero es más abajo de la Bobia, llegarías donde está la antena de tv, que no recuerdo ahora el nombre de l apeña, tampoco recuerdo si este bosque está antes ó después de pasar el túnel de Peñasjuntas, lo hice hace muchos años, puede que sean pasos distintos, de los que hablamos, saludos! y a seguir caleyando!
EliminarGracias marga. La próxima semana estoy de vacaciones y tengo pensado arrimar por la zona. Un compañero ha pasado hace poco y ya me contó como es y por donde.
EliminarSiempre que paso o descubro algún camino antiguo en semejante estado de abandono, me entristece bastante, la verdad. Por desgracia, es un mal extendido en nuestra comunidad. Buen hallazgo Cienfu, un saludo.
ResponderEliminarEs un lujo aventurarse por estos antiguos caminos e ir descubriendo lugares por los que hace mucho tiempo no circula nadie. Interesante propuesta que me guardare para algun dia. Un saludo
ResponderEliminarAsturias se puede dar por "descubierta" con un "investigador privado" como tú, Cienfuegos!!!... lástima que aquellos parajes me queden tan a desmano para poder utilizar tus investigaciones!!!... Saludos Esgalleros!!! =D
ResponderEliminar¡¡Lejos me queda ésta Asturias querida y siempre VERDE!!
ResponderEliminarLa ruta que propones, ¡¡genial!!
Gracias por compartirla con todos!!
Un besote.
Preciosa investigación Javi... de xuru.... que pa la próxima saques un rutón completu y copiarémoslo munchos de nós, jeje
ResponderEliminarUn abrazu
D.Nieto, como tú, siento pena cada vez que me tengo que meter por un camino que ves que otro tiempo fue precioso y está totalmente abandonado, pero, .... no queda gente en los pueblos y es lo que toca.
ResponderEliminarLinares, reconozco que siento debilidad en meterme por caminos antiguos poco frecuentados.
Vidal, ya sabes, en estos tiempos de pistas para todoterreno solo queda caleyar por sendas abandonadas.
Toñi, y tan verde que está , con este mes de julio que llevamos como para que nó lo esté.
Berto, tate sollerte que habrá delles vegaes pa tornar por allí. De xuru.
Un saludo a todos