07 agosto 2015

A la braña La Vicietcha

La Sierra de Santa Marta, que divide los valles teverganos de Taja y Valdecarzana no es especialmente visitada. Con pocos alicientes montañeros, dada su escasa altitud y ausencia de cumbres destacadas, no resulta especialmente llamativa. Sin embargo a mi sí que me atrae. Ya hace una temporada recorrí parte de su cara norte, tapizada por un espeso y precioso hayedo. Hoy le entraría desde el sur para acercarme a conocer la poco visitada braña de La Vicieḷḷa.
 

 
DATOS DE LA RUTA
  • Fecha: 06/08/2015
  • Zona: Sierra de Santa Marta
  • Concejo: Teverga (Asturias)
  • Inicio/Fin: Kilómetro 6 de la AS-265, Puerto de San Lorenzo
  • Distancia: 9,5 Km
  • Desnivel máximo: 520 m
  • Desnivel positivo acumulado: 550 m
  • Tiempos:  3 horas
  • Dificultad: Fácil, aunque la ruta transita por terreno de sendas ya muy perdidas y según la época del año podría presentar mucha maleza.
  • Track: la-brana-la-vicietcha
 

Sin saber muy bien por donde entrarle, mi idea era intentar subir desde el kilómetro 5 por las fincas de Pasoveiros y Navachos hasta ganar, bajo la cumbre de La Monreal, la senda que procedente del pueblo de Campos se dirige a la braña de La Vicieḷḷa, pero providencialmente me encontré en la carretera con un vecino de Villanueva, que me recomendó subir por la vaḷḷina Miruxieḷḷa, como un kilómetro más arriba por la carretera, aún cuando me avisó que "el monte ta perdíu".


Una pista sube desde la carretera con un par de revueltas hasta un prado. Junto al cierre de este, sigue un estrecho sendero que lo bordea por la izquierda.


Se trata de una perdida senda que, no obstante, se mantiene transitable, aún cuando se aprecia su escaso uso. Más arriba quedan restos de viejas fincas, ya hechas monte.


La senda gana el centro de la vaḷḷina, tapizada por un pequeño hayedo y va a ir subiendo por ella con fuerte pendiente.


Tal y como comentaba el paisano, a estas alturas la senda ya es un triste recuerdo y más que verla, la intuyo, aún cuando de vez en cuando se aprecian los tornos que daba para ir ganando altura, o puntualmente la caja de la misma.


A uno altitud de 1.040 m y cuando ya apenas se vislumbra camino alguno, alcanzo otra senda que cruza la vatchina de izquierda a derecha. Quizás pueda ganarse la collada superior por el fondo de la canal, pero a mi el vecino me adelantó la existencia de este cruce, diciéndome que aquí tomara a la derecha.


Y como soy obediente, es lo que hago, siguiendo la, ahora si, marcada senda que gana altura poco a poco saliendo del fondo de la vachina.


Pronto salgo a zona despejada con ejemplares sueltos de rebollu, más propios de la orientación sur de la sierra, y desde donde puedo disfrutar de alguna vista, como esta sobre la Peña Troméu, el Cuernu Chamas y el Paxarina. Hacia la cordillera estaba cubierto.


Cuando salgo a la despejada ladera de Valdegranda, me tiro a cortar hacia arriba, sabiendo que acabaré cortando el camino procedente del pueblo de Campos, en el que tomo a la izquierda para dirigirme hacia lo alto del cordal, con las Peñas de Santa Ana enfrente.


Sigo por la senda y alcanzo la collada de Ganzu Negru, donde paso a la cara norte de la sierra.


Es esta la parte más guapa del recorrido. La senda se ve en uso, está limpia y cuidada y atraviesa la zona alta del inmenso hayedo del Monte la Verde, que tapiza la cara norte de la sierra.


De vez en cuando se abren claros desde donde vemos el pueblo de Taxa/Taja y las estribaciones del Picu Redondu.


Al frente, mientras caminamos, aparece La Mirandieḷḷa, inconfundible por su antena en cumbre. Por cierto que la tarde estaba empeorando y parecía que se cubría rápidamente. Aquí me encontré con un pastor con el que estuve de charleta, recopilando información para futuras visitas.


Llego a La Vicieḷḷa o Veiciecha y primero bajo a las cabañas inferiores, en el camino de Taxa y que en algunos mapas nombran como braña de Campos, supongo que debido a que pertence al pueblo de Campos, con un par de cabañas, una de ellas grande y bien cuidada. Bajo ellas se abren buenas fincas que bajan hacia la Ponte el Vayu en el valle de Taxa.


Y luego subo a la Braña La Vicieḷḷa, enclavada en una amplia collada bajo las peñas del Picu el Castieḷḷu. La braña resulta bastante más grande de lo que imaginaba, con numerosas cabañas diseminadas, la mayor parte en ruinas, eso si.


Viejas cabañas bajo los crestones del Picu el Castieḷḷu, que en algunos mapas figura como La Forcada, la máxima altitud de la sierra, aunque el nombre de Castieḷḷu le viene de que aquí estaba el Castillo de Miranda, que controlaba el Camín Real de la Mesa a su paso por el cercano Puerto de San Lorenzo.


Un corro en el que crecen ya altos árboles. Por encima de él se conserva otro llamativo corro con techo abovedado de piedra, al que sin embargo, no le llegué a tirar foto.




En mejores días, la collada ofrece, sin duda, buenas vistas sobre la zona alta del valle de Teverga, aunque a esa mano yo me consuelo con las vistas sobre el Cuernu Chamas y el Vaxinas, mientras las brumas parecen empezar a cubrirlo todo.


A la vertiente contraria aún es peor, debería ver la Berza o el Picu Redondu, pero las nubes ya han ganado las cumbres de la zona de Vicenturo y amenaza tormenta.


Así que, tras recorrer La Vicieḷḷa, sigo ruta y decido continuar hacia San Lorenzo, aunque se que luego tendré que bajar por la carretera.


El ganado hasta La Vicieḷḷa parecen llevarlo desde San Lorenzo, a juzgar por lo "trayao" que está el camino en esta parte, aunque conserva puntualmente el empedrado.


La senda bordea por la vertiente de Taja/Taxa la cumbre del Castieḷḷu y tras pasar junto a una fuente, alcanza una nueva y amplia collada, La Granda, donde quedan restos de las cabañas de la braña la Vicieḷḷa d´Arriba y donde pasta un buen rebaño de vacas.


Desde La Granda veo hacia la zona de San Lorenzo la collada de La Mouta a donde tenía pensado llegar, para bajar desde ella a la carretera del puerto, ...


... pero La Granda es, incluso con la seca que hay, una llamarga, de la que salgo como puedo por una senda que va ganando altura poco a poco, en vez de haber buscado otra que, en la parte baja, cruzara la vaguada y se dirigiera a La Mouta.


Atrás se queda La Granda y la cumbre del Castieḷḷu, cuando se oyen truenos a lo lejos y los nubarrones se cierran sobre el valle de Teverga.


La senda me lleva hasta el Campu la Bota, por donde sube la pista a la antena de La Mirandieḷḷa, sobre el Camín Real de La Mesa, y una vez en ella me dejo bajar hacia San Lorenzo, en vez de alcanzar La Mouta. La tarde no está para muchos más experimentos.


Después ya solo me quedaría bajar por la pesada carretera, cortando un par de curvas. Ya bastante abajo, veo la vaguada por la que subí y la senda que sube a ganar el camino de Campos.


Y al final no llovió. Y a pesar del escaso paseo, doy la tarde por aprovechada. Entre esta y otra por la cara norte, tengo para montar una buena ruta desde el valle de Taja. Pero esa, para otro día. Os dejo el track por si os sirve de inspiración.



Un saludo
Cienfuegos

NOTA: Unos meses más tarde volvería a la braña de La Vicietcha realizando un circuito por toda la cabecera del valle de Taxa o Valdesantibanes, que podeis ver AQUI.

4 comentarios:

  1. Un paseo guapo! No conozco la ruta, es más, en la zona de Ventana, la parte derecha de la carretera, la tengo sin explorar. Escasa altura, cercanía, y las guapas brañas y paisaje, lo hacen ideal para un corto día de otoño
    Un saludo!

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    1. Pues solo puedo decirte que por ahí te estas perdiendo unos valles preciosos.
      Un saludo

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