22 marzo 2014

Llosoriu desde Ablaña

Para cuando publique esta entrada hará cerca de un mes que no soy capaz de salir de monte en condiciones. Por eso, y aprovechando que los días ya van alargandose, me conformo con retomar las escapadas exprés e ir tachando circuitos pendientes. Como este. Que me llevaría a darle la vuelta a todo el valle de Nicolasa, aprovechando las pistas de los cordales de Seana, Gallegos y La Meruxega para correr un rato. Lo malo es que en una semana en la que estábamos teniendo un tiempo primaveral, fui a escoger el único día en el que el sol fue incapaz de disolver las nubes, con lo que durante buena parte de la ruta me tocó "comerme" una cerrada niebla.


DATOS DE LA RUTA
  • Fecha: 07/03/2014
  • Zona: Cordales de Sena, Gallegos y La Meruxega
  • Concejo: Mieres (Asturias)
  • Inicio/Fin: Ablaña. Carretera MI-1
  • Distancia: 15,60 Km
  • Desnivel máximo: 790 m
  • Desnivel acumulado positivo: 900 m
  • Dificultad: Fácil. Tan solo reseñar que en determinadas épocas el descenso por el cordal de La Meruxega puede presentar bastante maleza.


Dejé el coche en el aparcamiento del cementerio de Ablaña (210 m), desde el que, además, se tiene una buena vista del pueblo, en el que por cierto tengo raices, con la térmica de La Pereda, al fondo.


Justo enfrente del cementerio arranca una carretera que empieza a ganar altura y que se dirige a las casas de La Carbina. Si todo iba bien, volvería por la carretera de abajo, la de subida al cementerio.


Ya desde bien abajo veo que hoy no voy a tener suerte. El día no puede estar más feo. Hace hasta frío y vengo con poca ropa. Ya arriba aún se pondrá peor. Todo el alto del cordal de La Meruxega aparece cubierto.



La carretera da una cerrada curva y desemboca en otra en la que tomo a la derecha, en dirección a las casas de La Faidosa.


Desde aqui ya debería empezar a tener una buena vista de gran parte del recorrido, con toda la zona alta del Valle de Nicolasa, que voy a recorrer, pero va a ser que no.


Poco despues dejo la carretera para tomar por una pista de hormigón que, con fuerte pendiente, me ha de llevar hasta las casas situadas a mayor altura.


Ablaña y la térmica de La Pereda ya van quedando muy abajo.


La pista hormigonada muere junto a la última casa. Allí continúo por otra pista de tierra, que sigue subiendo con un par de revueltas.



Alcanzo así la zona alta de Peña Fondera (510 m), con guapas fincas y alguna cabaña, donde doy una cerrada curva a derechas para seguir subiendo por entre los prados.



Y desemboco de esta forma en la carretera que llega desde la vertiente de Mieres y que sube hasta el Mirador de Seana, junto al que se localizan varios repetidores.


Me acerco hasta el mirador (610 m), aunque hoy no es el mejor día. Justo debajo, el lavadero de El Batán de Hunosa y el enlace de la Autovía Minera y la Autovía de la Plata.


Mieres


Y la térmica de La Pereda. Debería poder ver el Naranco, entre otros muchos lugares, pero hoy no.


En vez de seguir por la pista que arranca unos metros por debajo del mirador, salgo directamente desde éste por una senda que va a ir subiendo justo por el alto del cordal de Seana. Dejo atrás el mirador y sus repetidores, ...


... y me encamino hacia el cercano Pico Roiles.


Cumbre del Pico Roiles (695 m), cuando veo que ya no me falta mucho para meterme en la niebla.


Desciendo por el lado contrario y en vez de tomar a la derecha, la pista que antes comentaba, me voy a la izquierda, a bordear por ese lado las fincas del centro.


Un tramo bien guapo este.


Pero al final no me queda más remedio que bajar hasta ella y seguirla.


Justo debajo de Peña Rega (756 m), paro un rato a charlar con un pastor que se ha acercado a dar de comer a sus perros. Comentamos el frío que hace y lo feo que está el día, en contra de la buena previsión del tiempo que había para hoy. También me adelanta que no voy a tener suerte hoy con las vistas en cumbre. Algo que ya tenía bastante claro, la verdad.


Desde aqui poco más que contar. Me meto de lleno en la niebla y pierdo toda referencia de lo que me falta a cumbre.



Voy subiendo siempre por lo alto del cordal, cortando a ratos la pista, por otras menos pisadas o senderos. En medio de la niebla me salto la capilla de la Virgen Pastoral, que quería haber visitado, junto a unas cabañas.


Ultimos metros y cumbre (997 m). En medio de una cerrada niebla, con algo de viento y un frío de la leche.


Me resguardo un rato unos metros por debajo del vértice geodésico a beber y picar algo antes de bajar y de repente, parece que clarea un poco. Vuelvo hasta el vértice y disfruto del Efecto Brocken. Esto solo se da cuando la niebla por encima es muy ténue. El viento ha parado. Pinta bien, así que espero un rato más.


Y de repente, .... se abren los cielos.


Disfruto de un precioso mar de nubes hacia la Sierra del Aramo, que emerge en toda su longitud. Incluso asoma, levemente, la cumbre del Monsacro, a la derecha de la Mostayal.


Hacia la cordillera las vistas solo a medias. Con algo de niebla que no se llega a quitar. Las fotos no se ven muy allá. Zoom a tope y tratándolas digitalmente para eliminar la niebla. Por cierto, que con la niebla no consiguía orientarme muy bien y me costó identificar esta zona como la del Estorbín.


El Cellón, en la zona de Pajares.


Las Ubiñas.


Y cuando ya casi me iba lo que creo identificar como el Torres, encima de San Isidro.


Media hora esperé en cumbre por si abría más, pero no hubo suerte. Aunque parecía que la niebla iba a menos, seguía manteniéndose a la misma altura y poco más pude ver.


Así que nada. Había que ir pensando en bajar que quedaba un rato. Foto de cumbre, ahora con el sol dando, que bien que se agradecía con el frío que había pasado, y para abajo


Apenas bajo 20 m me meto de nuevo en la niebla. Consigo orientarme con el GPS y localizo la traza del gaseoducto que me guiará en la primera parte.


Aunque apenas si las veo, cruzo una zona que aún muestra las cicatrices de la intensa actividad minera que tuvo, mientras sigo los postes del gaseoducto.


Me salto, a propósito, la pista que me permitiría bajar directo a Conforcos, porque quiero recorrer el cordal de La Meruxega y sigo hasta la cumbre del Rasón (939 m), en la que no se ve absolutamente nada. Poco más abajo, dejo la traza del gaseoducto que baja a la izquierda para tomar un estrecho sendero que empieza a perder altura por el Cordal de La Meruxega.


Un tramo un tanto incómodo este con bastante maleza, y eso ahora en invierno, aún cuando la senda está perfectamente marcada en todo momento.



Y por fin salgo de la niebla. El Valle de Nicolasa ya se ve a mi derecha y todo el Cordal de La Meruxega que sigue al norte.


El polígono de Baiña, a la izquierda del cordal.


Sigo bajando por el filo del cordal. La idea original era intentar seguirlo hasta cerca de Ablaña y buscar alguna senda que me permitiera bajar directo, pero ya me habían adelantado que estaban muy abandonadas y tomadas por la maleza. Además el día tampoco acompaña lo más mínimo.


El pozo Nicolasa ya se bien en el fondo del valle.


Así que cuando alcanzo el camino de la Meruxega (645 m) abandono el cordal y tomo por el camino que, pasando junto a la fuente del mismo nombre, me acabará llevando a Conforcos.


El camino va bajando hacia el fondo del valle, cuando parece que por arriba la niebla está empezando a ceder por fin y empieza a clarear el día, o más bien la tarde.


Sigo bajando y ya veo la zona de Conforcos al otro lado. El día decididamente está abriendo cuando ya el sol está muy bajo, pero aún alcanza a dar en la ladera de enfrente.


Todo el valle de Nicolasa que tendré que recorrer por su fondo.


Por fin salgo a la pista, la misma que me había saltado en la zona alta del cordal, y por ella cruzo Conforcos y sigo bajando.


Las últimas luces del sol coloreando las laderas del Llano la Tabla, sobre Nicolasa. A buenas horas para despejar por arriba.



Por fin salgo a la carretera que sube hasta las casas del Llano la Tabla y por ella bajo hasta las instalaciones del Pozo Nicolasa.


Desde allí ya solo me quedaba recorrer por carretera el tramo que me separa de Ablaña, pasando antes por Las Quintanas. Desde cerca del castillete de Mina Llamas le tiro una última foto al Llosoriu, por fin despejado, cuando el sol ya se ha puesto por detrás del cordal.


Subo los últimos metros hasta el cementerio, donde paro lo justo para estirar un poco. Recojo el coche y para casa. Buena ruta, pero mal día. Habrá que volver. Os dejo el track.


Un saludo
Cienfuegos

17 comentarios:

  1. Maldita niebla, de lo malo malo alguna vista buena tuviste.
    Las dos fotos en blanco y negro me han gustado mucho.
    Saludos.

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    1. Si, la verdad es que lo de la niebla fue una putada. Con la predicción que había para ese día, fue una desagradable sorpresa. Pero al menos, el mar de nubes desde cumbre estuvo bien. Las de blanco y negro, es que hay determinados paisajes (los de mina, por ejemplo) que solo me los imagino en B&N.
      Un saludo

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  2. Muy guapo el reportaje. Una ruta que me interesa mucho...cercana para uno de esos días que no te apetece andar mucho en coche.
    Lo de la niebla...casi nos toca a nosotros en Peña Manteca hace unos días, aunque logró aguantar. Al menos, lograste el mar de nubes que es un lujo.
    Un saludo!

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    1. La verdad es que sale una ruta muy guapa y para los que vivimos por la zona centro, muy cómoda, por la cercanía. La niebla no veas lo que me fastidfió porque no conocía la ruta y al Llosoriu solo había subido una vez, hace muchos años, directo desde Nicolasa y teníia ganas de volver a disfrutar de las vistas.
      Un saludo

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  3. Hola Javi, lastima de dia...no obstante una zona que no conozco y que merece una visita. Un abrazu.

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    1. Jorge, ruta perfecta para una escapada expres de las mias. Sin mucha complicación y cerca de casa, pero que merece la pena conocer.
      Un saludo

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  4. Mala suerte con la niebla, pero así volverás jajajajaaa y si avisas igual no lo haces solu.
    Mira que tengo subio cantidá de veces a esa cumbre, pero nunca hice el Cordal de La Meruxega.
    Cuando dices del Estorbín, dices bien.
    Un saludo

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    1. Monchu, pues no descarto volver e intentar fozar por alguno de los senderos que bajan directos a Ablaña. Si vuelvo ya te aviso. A ver si no andas "por el extranjero", ja, ja.
      Un saludo

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  5. Estupenda ruta por nuestros olvidados y castigados valles mineros, una pena de dia, pero al menos nos has recordado parte de nuestra denostada riqueza de antaño, con ese buen reportaje. como dice Monchu la niebla te da para volver en otra ocasion.
    Un Saludo.

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    1. Pues como podrás ver en unos días, no ha sido la única ruta por nuestros valles mineros de esta temporada. Habrá más, ja, ja. Son zonas perfectas para darse una vuelta cuando no se tiene mucho tiempo y no dejan de tener su encanto.
      Un saludo

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  6. Que pateada bonita como tú le llamas, exprés jijijiji, zona minera por excelencia y por ello con fuerza y garra...por eso estas fotazas preciosas...como siempre saliendo de montaña la naturaleza nos brinda excelentes momentos...uno desde luego ese halo misterioso que te envuelve con el arco iris, es preciosa esa imagen...bueno y todas en general...y la ruta bien chula, con sol, niebla, mar de nubes, tuviste de todo.
    Nuestro abrazotedecisivo Javi

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    1. Zona muuuy minera y de gran arraigo familiar, Sara. Y si, tuve de "casi" todo. Por suerte, no tuve agua, ja ja.
      Un slaudo

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  7. Hola, soy un seguidor habitual de tu blog aunque es la primera vez que me "manifiesto". En primer lugar: bonita ruta, conocida en parte, y que espero conocer completamente próximamente.
    Por otro lado, pasaba para dejarte un enlace a una web sobre los techos de Asturias que he estado preparando en mis ratos y que pienso que podría ser de tu interés:
    http://guitarranalon.github.io/techosdeasturias/

    Por supuesto, si consideras esto spam y quieres quitarlo me parece perfecto.

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    1. Muy buena, antes de nada, gracias por pasarte por el blog, y para nada considero spma una web sobre los techos de Asturias. Por cierto, que lo he echado un vistazo. Efectivamente sobre las discrepancias de los techos, hay para escribir un libro. Por añadir uno más, el techo de Siero, para mi, es el Pico Cima o Pico Fario. Según el catastro, hace de límite municipal, por lo que debería contabilizarse. Ayer mismo hice el Llan de Cubel, techo de Pravia, cuando en la misma sierra estaría la Bordinga quie es más alto, ... en fin.
      Solo puedo recomendarte repetir esta ruta, pero con mejor día que yo, ja, ja.
      Un saludo

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  8. Gracias por los apuntes sobre las discrepancias, las revisaré en cuanto pueda y las incorporaré.
    En cuanto a esta ruta, la verdad es que las veces que fui siempre tuve un día espléndido, mi asignatura pendiente en ese sentido es Peña Mea, que no hay manera de saber qué se ve desde su cumbre :D

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  9. el Efecto Brocken ye como si vieres a la Virgen, sin ser la Virgen, eso ye lo que me pareció a mi cuando tuve la suerte de velu

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    1. La verdad es que es un efecto curioso. He tenido la suerte de verlo muchas veces y siempre me llama la atención.
      Un saludo

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