Fotografías 2022

Cambio. Disfrute. Saturación. Seronda. Otoño.

Una ventana a la nada se abría ante mi.

Una ventana al vacío, que invitaba a cruzar, a saltar, a olvidar.

A dejarse acunar el los brazos del agotamiento. A dormir.

Quizás al otro lado descasaría por fin.

Quizás.
 

Algo de asociales debemos tener cuando siempre buscamos calas así,

sin gente, sin ruidos.

Por no haber en esta ocasión casi que no había ni olas.

¿Habrá mejor desconexión?

#vacaciones

Playa, cañas, baños y lectura.
El final de un día tan relajado,

no podía ser otro que con uno de esos atardeceres perfectos.
Uno de los muchos que que nos regaló Illa de Arousa.

Dempues de les guerres astur-cántabres, los romanos llegaron pa quedase

y da fechu romanos fuimos, que yéramos ciudadanos.

Ya constuyeron, construyimos, delles mines pa extrayer l´oru.

Oru que fixo d´Asturies un de les provincies más riques del imperiu.

Más, como siempre nesta tierra nuestra, eses riqueces marcharon lloñe

y pocu o nada quedare equí. 

Na más que furacos.

Nun val entainar cuando voy pa la biesca,

Tiempu ye de jallar dellos requexos. 

D´agüeyar tres de la llastria, embaxu la jueya. 

Y esfrutar con delles caxigalines.

Urros de Liencres, Costa Quebrada. Cantabria Infinita

 ¿Infinita? Al menos, si no lo es, nos va a costar acabarla.

 

Lloré las ruinas de mi casa,

asolada por una fuerza desatada.

Entre sus muros alce la vista a lo que en tiempos fuera un techo,

 hoy ventana al cielo estrellado,

y allí, bajo las titilantes luces, encontré la fuerza necesaria.

Me alcé y en mi garganta noté la sed de la insaciable venganza.

Invierno. Blancura. Frialdad. Silencio. Quietud. Soledad....

Muerte.