Buscábamos algo corto que nos permitiera volver a comer a casa y me acordé de la cascada de Quei l´Augua o Cailagua, en Robléu, un sitio de esos que tenía muchas ganas de conocer. Apurando un poco quizás podríamos incluso hacerle una nueva visita a la cumbre de La Patana o Alto la Prida, el techo de Tineo, aunque ello significara subir y bajar por el camino de Los Cadavales. En cambio, si que variaríamos el regreso en la zona baja para volver a Robléu por las cabañas de La Cuandianada.
DATOS DE LA RUTA
- Fecha: 15/12/2021
- Concejo: Somiedo (Asturias)
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Inicio/Fin: Robléu
- Distancia: 13,50 Km
- Desnivel máximo: 990 m
- Desnivel acumulado positivo: 1.120 m
- Tiempos: 5 y 1/2 horas
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Dificultad: Moderado. Aunque el camino de Los Cadavales fue desbrozado hace no mucho tiempo, vuelve a presentar bastante maleza que, avanzado el año, sin duda lo hará incómodo en algún tramo. Lo mismo podría ocurrir en el acceso a la base de la cascada.
- Track: Patana-y-casada-de-Queilagua
Aparcábamos a la entrada de Robléu una mañana fresca, aunque menos de lo esperado. Pueblo muy arreglado con un pequeño mirador a la entrada y algunas tallas de madera destacables. Lo peor puede ser aparcar. No sobra el espacio. Si la cascada coge protagonismo - que lo cogerá porque bien lo merece - y tal y como me comentan, se va a balizar y publicitar como ruta, ya pueden ir pensando en hacer un aparcamiento.
Total que salimos de la Cima´l Pueblu por el ancho y buen camino que se dirige a braña Cortinas, con el sol dando ya en las peñas de la Patana o del Alto la Prida.
Cruzaremos sobre la Riega l´Escoréu, la misma que forma la cascada, pero debemos ir atentos pues solo un poco más arriba una senda entra a contramano, a la izquierda. Estaba marcada con un jito.
El sendero muere en lo que en otros tiempos fue un prado, hoy ya hecho monte, pero desde él sigue una estrecha senda en la que se aprecia huella, que va a continuar valle arriba. Por debajo nuestro veremos una buena cascada que merecería la pena si no fuera porque queda ensombrecida por su hermana mayor. El ruido nos la anticipa y de repente aparece ante nosotros la espectacular cola de caballo de Quei l´Augua o Cailagua.
Bajamos hasta el cauce y nos acercamos a la base de la cascada. El día de nuestra visita llevaba un buen caudal y la nube de agua mojaba constantemente la cámara. El sol, aún muy bajo y dando solo en la mitad derecha de la cascada, no ayudaron a hacer buenas fotos, pero de momento es lo que hay. Tiempo habrá de futuras visitas.
Una foto conmigo de protagonista para dar idea del tamaño de la cascada. A juzgar por lo que pude ver en los planos 1:5.000 del Principado y los datos de cotas del LIDAR del IGN, puede que sean más de 70 m de caída. Una de las más altas de Asturias y hasta la fecha, casi una desconocida.
Tras la sesión fotográfica regresamos al camino principal y seguimos subiendo hacia braña Cortinas, con un buen número de cabañas.
Desde aquí ya se empieza a tener una buena vista de la cabecera del valle del Pigüeña.
Un poco más arriba de la braña alcanzamos un cruce en el que dejamos el camino más ancho que continúa de frente y al que retornaremos más tarde, para tomar la senda que asciende a la izquierda, y que nos conduce al collado del Coguḷḷón, desde donde ya tenemos una preciosa vista del valle de Pigüeña, con Robléu bajo nosotros.
Desde el collado vamos a seguir la senda que asciende hacia los puertos de los Cadavales, en la cabecera de la riega L´Escuréu, la que forma la cascada.
Cuesta un tanto dar con la senda, perdida en un inmenso "felechal" y eso ahora en pleno invierno. No me lo quiero imaginar en verano.
La senda desciende luego al collado La Cruz, desde donde ya vemos el resto que nos queda a los Cadavales y también vemos que es posible que por arriba nos toque pisar nieve.
Y por debajo volvemos a ver la cascada.
La senda en esta parte está mucho mejor ya que fue desbrozada no hace mucho. Aún recuerdo mi primera visita a La Patana donde aquí tuvimos que atravesar una verdadera muralla de escoberos.
En esta ocasión la pega nos la pone el agua. En algunas partes tal parece que la riega entera baje por el camino.
Así que en las zonas peores, nos echamos al monte, literalmente, y cruzamos por el bosque.
Por fin salimos a los Cadavales. En ellos tomamos contacto con la pista que sube desde la vertiente de Cangas del Narcea y que nos habrá de llevar a la cumbre de La Patana. Tocará pisar nieve un rato, pero estaba perfecta para caminar.
Los puertos de Los Cadavales por debajo y al fondo las cumbres del Colmenosu y la Pachagosa. Eran otras de las "visitables" para esta jornada, pero dado que teníamos prisa y que presentaban mucha más nieve, se quedaron para mejor ocasión.
Finalmente hacemos cumbre en La Patana o Alto de la Prida, techo del concejo de Tineo. Allí pararíamos un buen rato a comer algo mientras disfrutamos de las vistas, como esta sobre la cabecera del valle del Pigüeña. A la izquierda el Mocoso y en el centro-derecha el Cornón.
Cornón a la izquierda y Cogoḷḷu Ceboḷḷeo a la derecha.
Todo el valle del Pigüeña
En primer término la afilada silueta del Vildéu. Tras él, a su izquierda Penachana y a la izquierda de ésta, Pena Orníz. Albos, Picos Blancos,...Somiedo y Babia, Babia y Somiedo.
De Peña Rueda (izda) a las Peñas Ubiñas (dcha), en plural.
Vistas sobre territorio ya de Cangas del Narcea. El que se destaca al fondo del todo, en el centro, es el Tonón, en el valle del Coto, que ascendimos hace una temporada como os conté AQUÍ.
Al fondo del todo sobresale el Mulleiroso, otro que también tenéis en el blog.
La villa de Tineo, bajo su sierra coronada de molinillos.
El, cuando menos curioso, fenómeno geológico de la Fana Genestoso, un enorme e imparable argayo, con la Sierra de Peña Manteca a la derecha.
Tras el pincho de rigor, volvíamos grupas, desandando de momento el camino hasta el collado Coguḷḷón, así que por lo pronto tocaba bajar nuevamente hasta los Cadavales.
Y senda abajo, disfrutando una vez más de las vistas sobre el valle.
La redondeada cima del Monegro, coronada por una antena, encima del pueblo de La Bustariega.
Para el regreso íbamos a variar el camino. Descenderemos a las fincas de La Cuendianada, que ya vemos por debajo, así que en el cruce que antes comentaba, tomamos ahora a la izquierda.
Hay varios cruces y toca ir un poco atento a ellos. Además los caminos están cerrados por varias portillas y cierres que tocará ir saltando. Creo que hasta seis, conté. En el primer cruce, bajamos a la derecha para bordear esta cabaña arreglada hace poco.
Chulo el camino
Bajamos hasta otra cabaña. La senda sigue casi en llano un rato.
Tras una fuente empezamos a perder metros rápidamente por un camino ancho. Muy guapo este tramo.
La senda acabará por llevarnos a otra, ya más bien una pista, en la que tomamos a la derecha y que nos va a devolver a Robleú por su parte baja, debiendo cruzar una vez más la Riega l´Escuréu.
Finalizábamos así una nueva ruta y aunque un poco pillados de tiempo, aún cumpliríamos horarios, volviendo a casa a tiempo de comer en familia. Os dejo el track.
Un saludo
Cienfuegos
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