09 diciembre 2022

Jario desde Oseja de Sajambre

Le había costado, pero el otoño ya estaba aquí y había que salir a disfrutar de los rojos y ocres y pocos lugares para ello como los hayedos sajambrinos. Tenía ganas de volver al Pico Jario que ya hubiera subido desde Soto de Sajambre. En esta ocasión me decanté por una amplia vuelta desde Oseja, subiendo un tramo del camino viejo de Valdeón para luego seguir a collado Viejo y a collado Dobres y coronar la Pica Samaya desde la que pasaríamos al Pico Jario. Descenso al refugio de Vegabaño donde comeríamos y para abajo por el viejo camino de Soto, desde donde regresaríamos a Oseja siguiendo un tramo de la Senda del Arcediano.


DATOS DE LA RUTA
  • Fecha: 01/11/2022
  • Zona: Precornión. Picos de Europa
  • Concejo: Oseja de Sajambre (León)
  • Inicio/Fin: Oseja de Sajambre
  • Distancia: 23,5 Km
  • Desnivel máximo: 1.160 m
  • Desnivel acumulado positivo: 1.560 m
  • Tiempos: 8 horas
  • Dificultad: Moderada. En realidad se trata de una ruta bastante sencilla. Tan solo hay que poner un poco de atención en una parte del ascenso por medio de bosque para no perder la senda correcta. Por su parte el ascenso a la cumbre de la Pica Samaya no es difícil, aunque si resulta incómodo.
  • Track: Pico Jario desde Oseja de Sajambre
 

Salimos de Oseja de Sajambre, donde por cierto no tiré ni una foto, con un día de esos de hacer afición. Completamente despejado, buena temperatura para caminar y los bosques que ya mostraban el color que veníamos buscando. De momento las vistas sobre el Niajo, al otro lado del valle del Sella, iban a acompañarnos durante un buen tramo.


Salimos por la pista que se dirige al área recreativa y por la que discurre el GR-201 Senda del Arcediano, en dirección al Puerto del Pontón.


La Pica Ten en el centro del valle, con el Pozua al fondo, ya sobre el Puerto del Pontón.


El valle del río de las Pontigas se estrangula al paso entre la Pica Ten y la Pica Burdio. Allí el viejo camino aguanta soportado sobre buenas armaduras en un tramo precioso.



Alcanzamos el Mirador de Verrunde, donde hay varios paneles explicativos y buenas vistas. Desde este punto el valle vuelve a abrirse.


Poco después llegamos a un cruce en donde dejamos el GR-201 que se dirige al Puerto del Pontón, para seguir por el ramal de la izquierda y que forma parte del Camino Viejo de Valdeón y que se dirige de forma directa al Puerto de Panderrueda.


Empezamos a disfrutar de los colores del bosque, mientras vamos ganando altura y empiezan a asomar cumbres conocidas.


Una más al Pozua.


Poco más adelante llegamos a un nuevo cruce. Una vez más dejamos a la derecha el Camino Viejo de Valdeón para tomar el ramal de la izquierda, que se dirige a la majada Pedroa, bajo la Peña los Mazos.


El ancho camino que traíamos muere aquí, en la vega. Toca buscar la senda que continúa subiendo valle arriba, siempre por la margen derecha del arroyo de los Pontigos.


A la salida de Pedroa nos sumergimos por fin en el hayedo. Una pena pillarlo tan de mañana y en sombra, pues ya estaba pleno de color.


Precioso todo este tramo con una poco marcada senda que va ascendiendo valle arriba.



Por fin la senda cruza el arroyo y entra en una pendiente canal por la que ganamos altura de forma rápida.


Empezamos a ver la cara sur del Jario. Aunque aún nos faltaba un buen tramo para llegar hasta allí.


La senda nos lleva a una vega en medio del bosque. La helada en la vega era de las buenas. Se ve que no le da mucho el sol. 


Seguimos subiendo por el hayedo con tendencia a la derecha, buscando la salida al cordal. La senda se pierde un tanto en la parte final, ya próxima a salir del bosque, pero enseguida la reencontramos.


Un último tramo ya por terreno despejado nos conduce al collado Viejo, donde daremos vista a la vertiente del Cares, la del valle de Valdeón.


Desde aquí tenemos ya las primeras vistas sobre los Picos de Europa. En el collado Viejo dejamos la senda que de frente desciende hacia el puerto de Panderrueda, para tomar la que continúa ascendiendo a la izquierda, dirigiéndose a la base del Pico Centenal.


Curiosa la senda aquí. Alcanza la pared y da un cerrado giro para cruzar en horizontal bajo el Pico Centenal por una guapa traviesa.


Ya habremos ganado altura bastante y las vistas empiezan a ser espectaculares, pudiendo ver las cumbres del Gildar y los Verdes del Cable, en plena Cordillera Cantábrica, así como los inmensos hayedos que tapizan sus valles..


A la izquierda vamos dejando el valle que desciende hacia Oseja de Sajambre, el mismo por el que hemos venido subiendo.


La senda discurre muy próxima al filo del cordal, bajo la modesta cumbre del Pico Guadañas y en el límite del bosque, que a esta altura es mayormente de abedul. Los Picos de Europa al frente. Un tramo este sencillamente precioso.


El sector de los Moledizos y Torre Bermeja, con la Canal del Perro a la izquierda.


El Jario a nuestra izquierda.


La senda gana un nuevo collado, la Collada Dobres, dando vista ahora al valle del Dobra. La pica que vemos a la izquierda es la Pica Samaya. La senda gira a la izquierda para subir justo bajo ella hacia la Colladina Blanca.


Poco más allá se cruza una nueva collada, justo a los pies de la Pica Samaya, así que no nos resistimos a ascenderla. No es un ascenso cómodo. Sencillo, pero sucio, con bastante maleza y mucha roca muy rota que lo vuelve incómodo. Con todo las vistas merecen la pena. La primera foto, a lo que nos queda hasta el Jario.


El macizo del Cornión, en los Picos de Europa.


Parte de los Urrieles asomando al otro lado del Cares.


Al fondo el Gildar y Gabanceda en la Cordillera Cantábrica.


Y por supuesto, Peña Beza, con el Cantu Cabroneru asomando por detrás.


Una más a la Bermeja.


Valle del Sella con el Pozua.


Nos bajamos de la Pica Samaya, con un descenso tan incómodo como el ascenso. En el círculo mis compañeros.


Desde la collada vemos el recorrido que hemos seguido en esta última parte.


La senda serpentea entre los Picos de Valdelafuente, cruzando varias horcadas y colladas y pasando de una vertiente a otra.


Poco a poco vamos aproximándonos al Jario.


Última pala de hierba a cumbre, con la Pica Samaya donde acabamos de estar.


Y cumbre del Jario. No le tiré foto al buzón. Pues nada, al lio. Unas fotos desde cumbre. La primera hacia Picos, con Vegabaño abajo.



Peña Beza


Vistas hacia el Desfiladero de los Beyos, con el Tiatordos al fondo.


Me desplazo a la aguja que queda al sur del Jario. Desde allí veo el imponente Niajo a la derecha y el valle del Zalambral a su izquierda. Por detrás asoman Ten y Pileñes y más allá aún los Mampodres.


Justo por debajo, Oseja de Sajambre.


El Puerto del Pontón con el Pozua a la derecha. Al fondo se recortan el Yordas y Peñas Pintas, en la montaña de Riaño.


La cumbre principal con mis compañeros desde la aguja sur.


Y una panorámica de las vistas sobre los Picos de Europa.


Íbamos bien de tiempo, así que decidimos tirar a Vegabaño y comer en el refugio. Así que de momento, para abajo hacia la collada Neón.


Y luego a dejarnos caer por el valle Turégano. Una solitaria cabaña que se ve junto a la linde del hayedo, es buena referencia para el descenso.


Los hayedos de Vegabaño estaban en su momento justo de color.




Un poco a la derecha de la cabaña entra una marcada senda al hayedo. Es la que nos llevará a Vegabaño.



En realidad nosotros nos dejamos un ramal a la izquierda que hubiera sido más directo, yéndonos por otro que nos saca al camino procedente del Puerto Dobres. Tampoco es una vuelta excesiva.



Y alcanzamos Vegabaño. Allí, en el refugio y con tan espectaculares vistas, pararíamos a comer tomándonos una cerveza. No siempre tenemos la suerte de poder permitirnos lujos así. 


Y tras la comida, pues tocaba seguir ruta, que aún quedaba un buen trecho para cerrar la circular. De momento nos despedíamos de Vegabaño y las vistas sobre Picos.



Salíamos de la vega por la pista que baja a Soto de Sajambre. Aquí íbamos a tener dos opciones. Seguir por la pista y luego tomar la que se dirige a Oseja, saliendo más allá a la Senda del Arcediano, o bajar a Soto de Sajambre y regresar a Oseja precisamente por la Senda del Arcediano. En distancia van parejos, pero me pareció que la primera opción iba a ser demasiada pista, mientras que el camino viejo de Soto siempre le aporta un plus.


Así que dicho y hecho. Enseguida dejamos la pista para tomar el viejo camino que baja más directo hacia Soto, atravesando un precioso bosque.




Ya en el fondo del valle continuamos por la pista que baja hacia Soto por La Cavada, Boa y El Piquero.


Alcanzamos Soto de Sajambre que deberemos atravesar de parte a parte hasta salir por su carretera.


Justo a la salida, damos con el punto donde, a la izquierda, baja el camino de la Senda del Arcediano a cruzar sobre el río Agüera. Este camino también está balizado como parte del PR.PNPE-10 Ruta de los pueblos de Sajambre.


Muy guapo este tramo también, aunque el haya ya no es predominante y al estar a menor cota, no presentaba tanto colorido.


Poco a poco vamos dejando atrás las vistas sobre Peña Beza.


El camino asciende hacia el collado Piedrafita, donde nos llega por la izquierda la pista por la que también podríamos haber seguido desde Vegabaño. Allí dejamos el valle de Soto y salimos nuevamente al del Sella.


Enseguida damos vista nuevamente a Oseja de Sajambre. Ya solo quedaba un último tramo descendente.


Entrábamos en Oseja junto a la Ermita de San Roque. Poco más adelante cerrábamos una amplia circular por tierras sajambrinas. Cambio de ropa y la cerveza de camino para partir el viaje. Os dejo el track.


Un saludo
Cienfuegos

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