
En ocasiones lees o ves una foto sobre un lugar y sabes que son sitios que tarde o temprano acabarás por conocer. La Senda Collantes era uno de esos. Aunque Pancho ya conocía casi toda la ruta, la belleza de Peñas Cabriegas hizo que no dudara en acompañarme en un circuito en el que ascenderíamos por la margen izquierda del Rubó y regresaríamos por la margen derecha del Tajadura. Por desgracia la niebla nos obligó a renunciar a la cumbre del Jajáo, pero no impidió que disfrutáramos de las visitas a las majadas de Carraspión, Tamandón, Tajadura, Nario o Collantes, ni que gozáramos cruzando los sedos del Paré las Conchas y del Paré Bermeju o con la visión de la Joradá.