Torre de los Traviesos (2.390 m) y Piedralluenga (2.295m)

Lo mismo no escogí bien la ruta en esta ocasión. La verdad es que la Torre de los Traviesos o Torre del Alba como también la llaman, ya llevaba en la carpeta de pendientes demasiado, pero hacerla después de un mes enterito sin calzarme las botas, en un día de mucho calor y alargarla sobre la marcha con la ascensión a Piedralluenga, lo mismo no fue la mejor idea. No es de extrañar que bajando hacia Vega Redonda no hicera otra cosa que tatarear la canción de M-Clan "Estoy todo roto por dentro, estoy todo roto y deshecho, estoy todo roto y no puedo seguir así".

DATOS DE LA RUTA

• Fecha: 30/07/2010
• Zona: Picos de Europa - Macizo del Cornión
  
• Concejos: Cangas de Onís (Asturias) y Posada de Valdeón (León)
• Inicio/Fin: PK 39+800 carretera LE-331. Puerto San Isidro 
• Distancia: 21,5 Km
• Desnivel máximo: 1.320 m
• Desnivel acumulado positivo: 1.600 m
• Tiempos: 8 y 1/2 horas
• Dificultad: Moderada. El entorno de Piedralluenga es una de las zonas más remotas, solitarias y de peor orientación del Cornión, con ausencia total de sendas, en donde deben extremarse las precauciones.
  

Subí a los Lagos justo antes del corte de la carretera en Covadonga y dejé el coche en Pandecarmen (1.070 m), saliendo de allí a eso de las 9 de la mañana. Subida a Vega Redonda tranquila por el archiconocido camino del Pozo del Aleman, Vega la Piedra, Vega Canraso, Rondiella y Collado Gamonal. En este tramo casi ni saqué fotos.

Desde la Vega de Enol, ya se veía el objetivo del día, y casi que durante toda la ruta, también.

En Vega Redonda (1.410 m) paré lo justo para llenar las cantimploras (dos, la camel bag y otra más, que el día prometia calor y por arriba no hay fuentes) y para arriba a acometer las cuestas de Llampa Cimera. Por cierto, poco ambientillo en el refugio me pareció, claro que a aquella hora, la gente ya estaría para arriba, supongo.

La verdad es que la zona de Llampa Cimera se me dió mejor de lo que esperaba. Dada la hora pude hacerla casi toda a la sombra y tiraba algo de aire así que casí sin darme cuenta alcancé el cruce (1.750 m) del camino del Collado la Mazada, bajo la mole del Porru Bolu.

Yo a la izquierda hacia el Collado la Fragua acometiendo los duros zigzags que lo preceden.

En el collado (1.900 m) nueva parada a tomar aliento y picar algo y ver lo que me quedaba por delante: la zona de las Barrastrosas, que sin ser dura siempre se hace pesada. Es un tramo largo de narices, que se hace eterno, además que ya empezaba a apretar el calor, así que paré a meter algo de nieve en la camel bag para que el agua se mantuviera fría. De hecho seguí haciendolo todo el día.

Se alcanza por fin, más tarde que pronto, la entrada al Jou de los Asturianos (2.090 m), antesala del Jou Santu y desde el que ya se disfruta de una magnífica vista sobre la Reina de Picos: la Peña Santa.

Justo a la entrada del Jou, antes de empezar a bajar, se debe remontar por la izquierda, ascendiendo por una zona de gradas sin muchas complicaciones, marcadas con jitos hasta alcanzar la ladera de la Torre de la Canal Parda.

Una vez en la zona alta veremos la picuda mole de la Torre de los Asturianos, a la izquierda de la mole mayor de la Torre de la Canal Parda. El camino que debemos seguir (marcado con jitos) nos llevará a bordear ambas torres por la izquierda. En todo este tramo tenemos al frente el objetivo del día: la Torre de los Traviesos.

Este primer tramo es muy agradecido, pues se va dando vista no solo a Peña Santa, sino a todas las cumbres que rodean el Jou Santu: la Torre de Santa María, la de la Horcada, de Enmedio, las Tres Marías y el Torco.

Una vez superada la Torre de los Asturianos damos vista al enorme "bujero" que forma el Jou de la Canal Parda (1.210 m). Lo mejor es rodearlo por la derecha, ganando la cresta que une las torres de la Canal Parda con la de los Traviesos.

Ultimos metros a cumbre. En el círculo (para dar una idea del tamaño) los tres montañeros que me precedían. Las vistas desde aquí ya eran impresionantes.

Una vez en la base de la torre se va ganado altura, alternando gradas y canaletas, sin ninguna complicación hasta alcanzar la amplia cumbre de la Torre de los Traviesos (2.390 m), con unas vistas de escándalo.

Hacia los Urrieles









Hacia el Cornión

Allí estuve un buen rato, primero charlando con tres montañeros que habían llegado minutos antes y luego, ya solo, comiendo tranquilamente y disfrutando de las vistas y buscando montañeros en las cumbres vecinas.

Después de comer y en vista de que era temprano, se me ocurrió alargar un poco la ruta. Las opciones eran la Canal Parda (que ya conozco de anteriores ascensiones), el descenso por el Canalón de los Desvios y el valle de Resecu (zona que no conozco y que no se me apetecía recorrer solo) o buscar una cumbre facilona y cercana y la verdad es que desde la cima de los Traviesos, la que parece que te está llamando es la de Piedralluenga, justo enfrente.

Así que nada, ¡vamos que nos vamos!. Descendí por la ladera norte, buscando la mejor bajada al collado que se ve entre los Traviesos y el Porru la Capilla (2.200 m) para luego bordear por la izquierda el Jou de Arenizas y pasando bajo el Tiro la Llera bajar unos metros más al collado (2.180 m) entre ésta y Piedralluenga.

Una vista atras. Descendí por el extemo derecho

La subida no tiene mucha historia, primero hacia la derecha para salvar una zona de llambrias y una vez superadas éstas, buscar la cresta, rodear un gendarme por su izquierda y seguir a cumbre (2.295 m) de Piedralluenga o Piedraluenga, según donde leas sobre ella.

La cima espectacular. Muy, pero que muy guapa, de verdad. Pequeña, pequeña, muy airosa, con unos cortados de miedo hacia la Robliza.

Fotos y media vuelta que el regreso es largo de narices y es que esto queda donde Cristo perdió la alpargata. Así que para abajo por donde vine. Desanduve el camino hasta la base de la Torre de los Traviesos, gané unos metros de altura por donde había bajado y siguiendo un rastro de jitos comencé a bordearla por su lado norte. Aquí me lié un poco, perdí el rastro y acabé engolado encima de un cortado por donde no había bajada, así que media vuelta y a bordearlo por abajo atravesando algún nevero hasta salir a una zona más plana (llano, llano, lo que se dice llano, allí no hay nada) donde reencontré el rastro de jitos y que ya sin perderlo me condujeron al pie de la Torre de los Asturianos, donde enlacé ocn el camino de subida de por la mañana.

Zona por la que crucé. Desde el extremo izquierdo, bajo la mole de los Travieos y junto a la que creo que es la sima del mismo nombre.

El descenso por el mismo itinerario, aunque con bastante más calor que por la mañana y toda aquella caliza reverberando. ¡¡Pufff!!. Nueva parada en Vega Redonda a refrescarme en la fuente. El refugio con algo más de ambientillo a aquella hora y para abajo.

Total que una muesca más y un pendiente menos en el libro de "Las 100 montañas más guapas de Asturias".

Un saludo
Cienfuegos