DATOS DE LA RUTA
- Fecha: 22/01/2022
- Concejo: Cabrales (Asturias)
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Inicio/Fin: Mirador Pedro Udaondo. Asiegu
- Distancia: 17 Km
- Desnivel máximo: 850 m
- Desnivel acumulado positivo: 1.255 m
- Tiempos: 7 y 1/2 horas
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Dificultad: Moderado. Algún tramo en la zona baja de la sierra, se hace por sendas muy perdidas que avanzado el año podrían presentar mucha maleza. En la zona alta de la sierra hay que tener especial cuidado con la niebla, ya que es terreno de muy difícil orientación.
- Track: Peña-Blanca-y-Ubena-desde-Asiegu
Arrancaba del pequeño aparcamiento existente junto al mirador Pedro Udaondo, encima de Asiegu, con una fría mañana. -2º en Asiegu, pero -6º en Carreña. Inversión térmica. El sol aún no levantaba sobre el horizonte, cuando yo ya tiraba la primera foto sobre el Urriellu, la primera de muchas, pues a lo largo de toda la jornada tan totémica silueta iba a ejercer una irresistible atracción hacia la cámara.
Allí mismo tomo por la pista que sube hacia el collado de la Cruz de Tobesín, donde me alcanzan los primeros rayos de sol.
En la collada tomo la pista de la izquierda para luego seguir de frente y, dejando atrás una cuadra y cruzar un bosquete, doy vista ya a la Sierra del Cuera, teñida de naranjas, y en ella veo el trazado de parte del recorrido que voy a hacer para ganar la parte alta de la misma por la Cruz del Virzu Carreña.
Ancho y buen camino, soportado en largo tramos por buenas armaduras, que desciende por medio del precioso bosque de robles de Monte Lleredu, hacia el fondo del valle de Carreña.
Alcanzo el fondo en Les Cuerries, donde paso junto a un viejo molino, cuidadosamente rehabilitado.
Justo por debajo de él, salgo a la senda que llega desde Carreña y va a ir subiendo valle arriba y que en última instancia me permitiría alcanzar las cabañas de Tebrandi.
El valle se encañona un tanto en la zona de Pedrellada, haciendo que la riega se descuelgue en varias cascadas.
Por fin la senda abandona el fondo del valle y sale a una zona despejada de arbolado, aunque muy tomada de cotoya donde, por suerte, continúa el buen camino y desde donde veo el valle que desciende hacia Carreña.
Alcanzo las cabañas inferiores de Abuja, mayormente en ruinas. La primera junto a un precioso tejo.
Más arriba hay un segundo grupo de cabañas, una de ellas a la sombra de un espectacular roble.
Desde aquí podría seguir subiendo y ganar fácilmente las cabañas de Caxigu y Tebrandi, saliendo a la pista que llega desde Asiegu, pero no es ese mi destino. Yo quiero cruzar a la derecha, para seguir por los Hedraos y el Javar, así que tomo una de las múltiples sendas de ganado que cortan la ladera, con algún tramo un tanto tomado de maleza. Cuestión de ir viendo por donde pasamos mejor.
Para cuando alcanzo las cabañas en ruinas de los Hedraos, ya estoy a bastante altura y empiezo a ver sobresalir el Tiatordos o el Campigüeños al fondo.
Gano unos metros más para salir a la senda que desde Tebrandi se dirige al Javar, donde se conservan un par de buenas cabañas.
Desde aquí veo la siguiente collada, la de Alisa. No llegaré hasta ella. Antes de llegar perderé unos metros para acercarme hasta la estupenda fuente Alisa, para luego buscar la senda que sube a la Cruz del Virzu Carreña.
Tras cortar a derecho los primeros metros, doy con la senda. Se muestra clara y sube trazando varias zetas.
Conserva algunas armaduras. Un acceso muy guapo a la zona alta del Cuera. Al fondo, la pista que sube de Asiegu a Tebrandi.
Y por fin alcanzo la horcada de entrada al Puertu Cuera, la Cruz del Virzu Carreña, donde además, para hacer honor a su nombre, hay una cruz. Un sitio perfecto para una primera parada para comer algo disfrutando de las vistas sobre los Picos de Europa. En el fondo del valle, Carreña. Por cierto, que los tonos claros de Carreña, no son nieblas ni humo, sino la terrible helada que había.
Accedo a las primeras vegas del Cuera y al otro lado de la horcada de la Cruz del Virzu Carreña veo lo que creo que es Cabeza la Cerezal. No tenía muy claro qué hacer, así que, de momento me voy a por ella.
Aunque lo que tengo claro es que luego volveré sobre mis pasos porque el objetivo del día es Peña Blanca (izda) y Cabeza Ubena (centro).
Alcanzo Cabeza la Cerezal, una cumbre poco sobresaliente marcada por un montón de piedras y desde la que veo el Tiatrodos al fondo y los pueblos cabraliegos de Puertas, Pandiellu y Canales.
En principio se me apetecía haber seguido hasta Peña Llavinca, cumbre bastante más destacada, pero eso sería irme mucho hacia el oriente, para luego tener que volver hacia atrás, así que lo dejo para otra ocasión, quizás accediendo por alguna otra de estas viejas sendas.
El Turbina con su doble cumbre, en el centro, y Peña Llacia a la derecha.
Bajo de Cabeza Cerezal directamente al norte, buscando la ubicación de la majada de l´Abeduliu (centro), con la de Llapudia a la derecha.
En el Abeduliu me aguardaba una helada de las buenas. Allí sorprende el tamaño de alguna de sus cabañas, si bien ya todas en ruinas.
Salgo de l´Abeduriu por la derecha, por una marcada senda que va a entroncar con la que llega desde Llapudia y Tornallás. En ella tomo a la izquierda, en dirección a Julespina, con Peña Blanca al fondo.
Paso por Julespina. Lo de esta majada van a tener que explicármelo. Mientras que la mayor parte de las cabañas del resto de majadas del Cuera y tantas otras zonas de nuestras montañas, están en ruinas, las de Julespina están todas perfectamente arregladas y eso que no queda precisamente cerca de ninguna pista. Una preciosidad y una gozada ver majadas así de cuidadas aún.
Continúo por la senda que me lleva hacia la majada de Manzaneda. Sin embargo no pasaré por ella, ya que dejando la senda voy a bajar a la derecha, al fondo del jou.
Y es que desde aquí tengo una buena vista de la aproximación que voy a realizar hacia la base de Peña Blanca, subiendo por una especie de valleja que se forma y que va enlazando pequeñas zonas de pastizal, hasta alcanzar una horcada en Entrepicos por la que cruzaré para acceder directamente a los Jogos de la Concha.
Una vista atrás a la zona que he venido cruzando.
Alcanzo los Jogos de la Concha, donde salgo ya a la senda habitual de acceso a Peña Blanca, que cruza curiosos pasajes.
Después la dejo y empiezo a ascender hacia Peña Blanca por donde mejor lo veo. Subo con tendencia a ganar la cresta en el extremo oriental, para recorrer la cumbrera entera por arriba. Obtengo así una buena vista de la Sierra del Cuera.
La helada en la Llosa Viango era sencillamente impresionante. Parecía que hubiera nevado. No quiero pensar la temperatura que habría allí.
La villa de Llanes al borde del mar Cantábrico. Empezaba el espectáculo visual del Cuera. Mar y montaña. Cantábrico y Picos de Europa.
En la cumbre de Peña Blanca pararía un rato para disfrutar de las vistas y descansar. Además tenía la cumbre para mi solo. De hecho aún no había visto a nadie.
Sierra de Cocón, con el Cuetu la Cerralosa en el centro. Lo que asoma a la izquierda creo que es Peña Sagra.
Macizo de Ándara.
Macizo de los Urrieles.
Urriellu (izda), Grupo de los Albos (centro) y Torrecerredo y Cabrones (dcha)
Macizo del Cornión.
Y una panorámica del Cantábrico. ¿Qué más se le puede pedir a una cumbre?
Póo de Llanes
Mientras descansaba, trazada el mejor itinerario para cruzar los Virzos, la zona que separa las cumbres de Peña Blanca y Cabeza Ubena, ya que es un tramo de muy mal andar que puede atragantarse.
Tras un buen rato en cumbre, sigo ruta. Recorro la cresta ahora hacia el extremo occidental. Se anda mal ya que tiene muy mal pisar, muy rota y con mucho pozo, pero quería disfrutar de las vistas hacia esa mano, con las sierras de Hibéu y Benzúa y el Sueve al fondo.
Luego bajo por donde mejor o peor veo hasta la cabecera del valle del skar. Desde luego no es buen terreno. En los Virzos acierto con huella de paso que me encamina bastante bien y los cruzo sin muchas complicaciones.
El Benzúa desde la collada anterior a Ubena.
Y cumbre de Cabeza Ubena, con su cruz y su buzón. En ésta apenas si pararía.
Bajo la cumbre, los valles de Cabrales y al fondo el Cornión.
Habían ido levantándose brumas y el Tiatordos ya no se veía tan bien.
La Sierra de Hibéu, con su máxima altitud en Cabeza Juralisa, al otro lado del valle del río Las Cabras.
El Benzúa (izda) y los valles que descienden hacia Posada de Llanes.
Buena vista sobre gran parte de la Sierra del Cuera, con el Turbina al fondo a la izquierda.
Recorro el corto tramo que me separa del Tiedu y alcanzo la tercera cumbre de la jornada. Aquí pararía un poco más.
El Turbina
Justo bajo cumbre, Vega Brañes, a donde iré después.
El Picu con Collada Bonita tras él.
Torrecerredo y Cabrones. ¡Será por vistas!
Y al fondo del todo, aunque no se ve muy bien, Lastres. La cumbre de la derecha es el Jorovitaya en la sierra de Cueva Negra.
Los Jogos de Ubena, esa sucesión de llamativas pozas, perfecto ejemplo de modelado kárstico. Menudo "malpais" para cruzarlo con niebla.
Por fin bajo hacia Vega Brañes. La recorro con calma e incluso me acerco a su salida hacia Manzaneda y Julespina. Curiosidad, ya que desde este lado nunca me fui hasta ellas. A la salida de Vega Brañes veré a los únicos montañeros del día.
Luego desando un poco y asciendo a ganar la Cruz del Virzu Brañes, la amplia collada por la que salgo del Puertu Cuera, en la zona alta de la sierra, para empezar a perder metros por su ladera, cuando ya veo abajo Tebrandi y la pista que sube desde Asiegu.
Un buen camino me hace perder metros hasta la majada de La Mata, nombre que le viene al pelo, pues está metida, diría que casi camuflada, entre una mata de árboles.
Por fin, a la vista de Tebrandi, en aquella ladera tan bien orientada al sur y protegido del frío aire que corría por arriba, paro a comer, que ya eran horas y había ganas.
Un restaurante con preciosas vistas.
Después bajo a Tebrandí. Allí tomo contacto con la dura pista que me habrá de llevar a Asiegu. Desde ella, ya de bajada, veo el trayecto recorrido por la mañana para ascender desde el fondo del valle de Carreña, el paso por los Hedraos y el Javar y el tramo para ganar la Cruz del Virzu.
Bajo hasta Asiegu. En realidad no llego a entrar en el pueblo, ya que lo bordeo por la carretera que le pasa por arriba.
Por ella vuelvo al mirador de Pedro Udaondo. Mientras me cambio de ropa y aprovecho para lavarme un poco en una fuente, veo como el sol va descendiendo e iluminando la oeste del Picu.
Una última foto con el sol ya bastante bajo y para casa.
En Carreña seguía la helada. De hecho no parecían hacer pasado de 5 grados en todo el día. Yo aún pararía de camino a tomar la consabida cerveza pero en algún sitio un poco más templado. Os dejo el track.
Un saludo
Un saludo
Cienfuegos
Guapas fotos y ruta
ResponderEliminarGracias Ana. La zona ayuda mucho con las fotos, ya sabes.
EliminarUn saludo
Soy de Asiegu y de Arangas y se de otras rutas que podrías hacer
EliminarGracias "anónimo", pues soy todo oídos, que siempre estoy dispuesto a que me descubran nuevos (viejos) caminos. Y si en los topónimos ves algún error, no dudes en corregirme. Lejos de importarme, te estaré agradedido. Un saludo
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